Eres tú

Ana Albadalejo Romero

Mengíbar

Eres Tú,
quien alienta hasta el alma
con versos de primavera,
quien de los cirios arranca
aroma de incienso y
sobre estera de lirio
sus pies descalzos hallan consuelo.

Eres Tú,
soporte para el mayor peso,
con una gubia forjó tu forma
el sentimiento.

Ante Ti se vuelve molécula
el Firmamento,
minúsculo verbo,
de humilde cuna,
tu misión, nuestro ejemplo.

Eres Tú,
jardín de luz para la ceguera,
oscuridad al lamento,
siento, que necesito tu aire,
para de Ti llenar el cuerpo.

¿Cómo poder contemplar tu tormento,

divisar tu agonía, sin estremecer el aliento?

Bondadoso es tu Reino,
morada donde refugiarse,
recogimiento,
hombro de soporte a tanto peso.

Amargura respiran los cofrades
al contemplar tu paso,
llevarte en sus hombros,
su sueño,
compartir emociones y
de lágrimas verter el recuerdo.

Eres Tú,
quién alienta el espíritu,
con estrofas de cuaresma,
donde el color de la Gloria
sacia el tormento,
camino de paz y vida,
aun estando muerto.

Entre la mente y el alma,
eres consuelo,
portador de la llave del Universo,
a quien el orgullo del injusto
dio infinito tormento.

Eres Tú,
mi Dios, Rey de los Cielos,
Padre de la Gloria y descanso eterno